Muchas capitales europeas son perfectas para una escapada de fin de semana para descansar. Una de las ciudades más atractivas para los turistas es Lisboa, por su ubicación, gastronomía y arquitectura icónica. Sin duda, cuanto más tiempo pases en una ciudad, más cosas podrás ver y hacer. Pero si tienes pocos días, este artículo te ayudará a decidir qué hacer en un fin de semana en Lisboa:
1. MIRA LA CIUDAD DESDE ARRIBA
Una de las cosas imprescindibles en Lisboa es contemplarla desde las alturas. Hay numerosos miradores en toda la ciudad: visita el Castillo de San Jorge, sube al Arco de la Rua Augusta o al Mirador de Santa Luzia para disfrutar de las mejores vistas.
2. PRUEBA LOS HELADOS
Algo que no te puedes perder en Lisboa y que hará que se te haga la boca agua: aunque el helado italiano es famoso, el de Lisboa no se queda atrás. Si quieres sentirte como un local, no dudes en visitar Santini, en Rua do Carmo.
3. VIAJA EN TRANVÍA
Los tranvías son uno de los emblemas de Lisboa. Sin duda, viajar en tranvía es una de esas actividades que debes hacer. Algunos tienen décadas de historia y recorren las calles del casco histórico, pero el viaje en el Tranvía 28 es, sin lugar a dudas, el más recomendado. Ve con tiempo, ya que las filas suelen ser largas.
4. PASEA POR ALFAMA
Ropa colgada en los tendederos, casas decoradas con azulejos de colores, vecinos asando sardinas en la calle… Este barrio de Lisboa no parece pertenecer a una capital europea; es casi como un pueblo donde los vecinos se saludan desde los balcones y los niños juegan al fútbol sin preocuparse por el tráfico. Durante este paseo, no olvides visitar la Catedral de Lisboa, un templo que parece más una fortaleza que una iglesia.
5. MIRA AL CIELO DESDE EL CONVENTO DO CARMO
Este convento es uno de los lugares más encantadores de Lisboa. Sus ruinas forman parte del Museo Arqueológico. Entre las columnas y arcos de lo que fue la iglesia del convento, podrás admirar el hermoso cielo azul de Lisboa.
6. CAIS DO SODRÉ, EL BARRIO DE MODA
Cais do Sodré se ha convertido en el barrio más de moda de Lisboa. Antiguamente frecuentado por marineros y prostitutas, hoy es un lugar animado con restaurantes originales y antiguos burdeles convertidos en bares. Si quieres disfrutar de la noche lisboeta, este es tu lugar.